En los últimos tiempos, se está hablando mucho de temas de género. Se ha convertido en un tema trending topic tanto en los medios de comunicación como en las conversaciones de bares entre amigos y familiares… ¡el feminismo está de moda! Y aunque sea algo para celebrar, cuando comprobamos que año tras año continuamos con las mismas reinvindicaciones de siempre -la búsqueda de la igualdad- la sensación que se queda es bastante agridulce. Si nos centrarnos en el ámbito laboral, podemos comprobar que esta desigualdad se encuentra en todos los sectores, pero hoy me voy a centrar en la industria del cine. ¿Cuál es la representación en nuestro país de la mujer en el cine? ¿Por qué la presencia femenina en cargos de liderazgo en el sector cinematográfico es prácticamente anecdótica?
Según el Informe Anual de CIMA 2016, presentado el pasado 7 de noviembre, las mujeres representan únicamente el 26% de los cargos de responsabilidad en el cine. El estudio se realizó analizando los 154 largometrajes presentados a los nominaciones de los Premios Goya de ese año donde casi 2.270 profesionales tenían cargos de responsabilidad de los cuales el 74% de ellos eran hombres. Estos datos, son muy similares a los del 2015.
¿Cómo ha sido la situación en el 2017? Aunque tendremos que esperar a que se publique el nuevo informe de CIMA (Asociación de Mujeres Cineastas y de Medios Audiovisuales) para conocer todos los detalles, ya tenemos datos que nos revelan que el sector mantiene una tendencia estática, sin evolución positiva hacia la igualdad de oportunidades y de reconocimiento del talento femenino. En total, solo un 26,8% de los profesionales nominados a los Premios Goya han sido mujeres. En concreto, únicamente 30 nominaciones han ido a parar a profesionales mujeres frente a las 83 nominaciones destinadas a profesionales hombres. Dentro de esta falta de representación, destaca especialmente la falta de presencia femenina en las categorías técnicas.
Podríamos pensar que en esta edición de los Goya, que se celebrará el 3 de febrero, el peso de la mujer en el cine es mayor ya que nos encontramos con dos películas dirigidas por mujeres que optan a la categoría de Mejor Película (Verano 1993 y La librería), frente a un total de cero títulos el año anterior. Respecto a la dirección, esta edición cuenta con dos directoras nominadas: Isabel Coixet como Mejor Dirección y Carla Simón como Mejor Dirección Novel. El año anterior solo hubo una representación femenina, Nely Reguera por María (y los demás) en la categoría de Mejor Dirección Novel.
Pero… ¿a qué se debe esta falta de presencia de la mujer en el cine? ¿Acaso no existen directoras con talento? Todos estos temas se trataron del 26 al 28 de diciembre en el I Ciclo de Cine Dirigido por Mujeres en Madrid, proyecto organizado por la productora Malvalanda con el apoyo del Ayuntamiento de Madrid, en el que tuve la suerte de trabajar desde Flamingo llevando la comunicación y prensa.